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sábado, 17 de enero de 2009

La revolución engañada

En diciembre de 2007 los venezolanos votaron NO a las reformas propuestas por su Gobierno para cambiar la Constitución y "continuar" la vía al socialismo. Está claro que tal vía no era al socialismo, sino a engañar la "revolución" y a los venezolanos. Si en Irlanda no quisieron comerse el Tratado de Lisboa y les obligarán a volver a las urnas, en Venezuela tampoco quisieron comerse la reelección ilimitada, y volverán a hacérsela comer. Qué bonita es la democracia degenerada.

Para esconder la medida, se permitirá la reelección ilimitada de todos los cargos elegibles (gobernadores, alcaldes, diputados…). Es decir, se coloca a la misma medida que Europa, pero se aleja de la historia constitucional americana de limitar los mandatos. La limitación de los mandatos es una medida muy beneficiosa, pues se evita caer en el personalismo, caudillismo, o liderazgo de un individuo. Esto lo quieren quitar.

En el anterior referéndum, Chávez calificaba de muy importante aprobar tanto su reelección como la modificación de la Constitución. Sin embargo, parece que esa emergencia ha desaparecido, pues no se ha planteado modificar la Constitución más que los artículos sobre los cargos electos.

Y la pregunta del referéndum, en vez de ser un simple y claro "¿aprueba usted la reelección ilimitada de los cargos electos?" será "¿aprueba usted la ampliación de los derechos políticos de las venezolanas y los venezolanos en los términos contemplados en la enmienda de los artículos 230, 160, 174, 192 y 162 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, tramitada por la Asamblea Nacional, al permitirse que la postulación para todos los cargos de elección popular de modo que su elección sea expresión exclusiva del voto del pueblo?"

Ya no hay medias tintas. Quien se oponga se opone a la democracia. ¿Es que no es posible que exista un venezolano partidario de ir al socialismo pero que se oponga a la limitación de mandatos? Ese venezolano se verá atrapado, desamparado, acorralado entre la oposición que no acaba de expulsar sus rastrojos golpistas y la mayoría gubernamental que se enfanga en la corrupción. Al venezolano se le quiere engañar y a la misma "revolución" prostituir.

"¿Que yo soy imprescindible? No. Sólo que cambiar de jinete o de capitán (...) cuando todavía no está consolidado las etapas de maduración iniciales de un proceso es sumamente riesgoso", proclamó Chávez ante la Asamblea Nacional de Venezuela. La "revolución" no necesita de líderes, o de "capitanes". La "revolución" necesita mantener íntegro su programa democrático y socialista, no servir a los intereses de la familia de Chávez.

3 comentarios:

  1. Yo pondría una limitación clara de 3 mandatos a todo funcionario y burócrata en su cargo. Es decir, pasados 10-12 años todos deben dejar su puesto, bien sea ascendiendo de categoría o dejando la vida política.

    Un saludo.

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  2. a mi no me parece mal lo de no limitar el mandato o la eleccion en un cargo politico. siempre queda la palabra del ciudadano que on su voto decide si el politico en cuestion continua o no.

    y respecto a chavez. esta claro que las revoluciones o las maneras de hacer no son solo de personas, pero si que una revolucion, en este caso la venezolana, a lo mejor no se sabe hacer igual con otro lider u otras personalidades, por que esta vida te demuestra que las manera de hacer dediferentes personas tiene mucho que ver, muchisimo en saber llevar situaciones y en las posteriorees consecuencias.

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  3. Detrás de una victoria o de una revolución o lo que sea no está sólo una persona, hay siempre todo un equipo detrás, entre los múltiples asesores que elaboran los mensajes, programas, estrategias hasta la base que se encarga de hacer llevar de forma más fácil todos los mensajes que se quieran transmitir. Al final la cúspide de la pirámide puede llegar a ser un rostro prescindible. La cuestión es hallar el equilibrio ideal para que no se sea una marioneta a saber al servicio de qué o una pirámide rígida que funciona de arriba a abajo. En estos casos, la limitación de mandatos es muy buena para evitar esa degeneración.

    En algún momento la izquierda "bolivariana" de Venezuela tendrá que dar paso a otro líder. Y aquí en esto han cometido un error, haciendo de Chávez un culto a la personalidad, como el único guía válido, y al final el mensaje y el programa han quedado enterrados bajo su imagen.

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