Páginas

viernes, 4 de julio de 2008

Sobre el caciquismo de la Restauración canovista

“Y el cacique demostró con sus hechos aquel dicho: no hay más ley que mi capricho, aquí el Estado soy yo. Él sirve de providencia y es juez en última instancia, todo pleito él lo sustancia, toda causa él la sentencia. Él engendra diputados y distribuye estanquillos. Yo defino así al cacique: un Cánovas en pequeño, un ministro, en conclusión, es un cacique muy grande”.

El Solfeo
Leopoldo Alas, Clarín

No hay comentarios:

Publicar un comentario