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viernes, 18 de julio de 2008

El regreso

¡Hola a todos, navegantes!, estoy recién llegado del merecido descanso vacacional. Vaya, las Juventudes sí que han dado de sí estos días, no estoy aún del todo acostumbrado a hablar de ellas como militante en mi blog, ya dije que yo cuando escribo aparto militancia y pongo lo que pienso. Lo que pienso que, puede gustar, puede no gustar. A quién, pues a mucha gente, incluida la Stasi (Alberto lo llama KGB, yo para no ser un copión la denomino Stasi). No sabía que ahora se pasan informes de lo que escribimos, ¡dios mío! Sí, somos muy peligrosos, pero unas palabras no tambalean sillones, las palabras llevan a actos, y esos actos son los que sí pueden hacer cambiar las cosas. Por mi parte, con Stasi o sin Stasi, no voy a dejar de poner lo que pienso.

¿Y qué? Estoy muy contento de poder escribir con libertad y haberme tocado nacer en un país democrático. Escribo lo que pasa por mi mente, lo que atormenta mis ideas. Pueden ser cosas equivocadas, otras no, porque sinceramente, nadie es perfecto. Pero yo, como muchos otros, trabajamos por un socialismo mejor. ¡Abrid los ojos! La derecha está allí, esperando el momento en el que la izquierda política se mate a sí misma. Si no, si seguimos en la vorágine de emplear la organización juvenil para trepar hacia otros cargos, sugiero que las juventudes se cambien el nombre por el de Nuevas Generaciones, porque lo único que se habrá mostrado es que cualquier ideología en la organización habrá muerto.

Os dejo una frase de V de Vendetta:

Bajo esta máscara hay unos ideales, y esos ideales son a prueba de balas.

Desgraciadamente por las vacaciones no he podido acudir al Comité regional de las JSM, pero eso no ha impedido estar al tanto de lo que ocurrió. Era natural que la lista oficial ganara, si no, habría sido algo muy divertido. Pero aún así sigue revelando la existencia del manifiesto descontento hacia la forma de actuar de las JSM. Por mi parte no queda más que decir lo que es y será una constante: Daniel Méndez, rectifica.

Saludos a la Stasi. ¿Quién será?

Coherencia de los socialistas: mi Agrupación

Parece que se van a enfrentar dos listas muy distintas en el próximo comité regional de las Juventudes Socialistas de Madrid. Una es la dirigida por su Secretario General, Daniel Méndez, y otra es una unión crítica a su forma de dirigir las Juventudes en Madrid, y básicamente una lista que apoya a Tomás Gómez.

Yo, personalmente, ya ha quedado muy claro que no veo bien que esté Tomás Gómez por una razón: no hace oposición. Pero es un socialista, y si resulta elegido lo apoyaré igualmente desde mi voz crítica, y si mejora y sabe dar lo mejor de sí mismo podré decir, ¡Eureka, era hora!

Pero yo, apoyaré siempre a alguien muy importante en mi concepción política: José Cepeda. Y diré por qué, contando una historia:

Era 2003, en la campaña electoral de las elecciones municipales y autonómicas, con Trinidad Jiménez como candidata por el Ayuntamiento y Rafael Simancas por la Comunidad. Yo aún, con 14 años, acababa de tomar cuenta desde el año pasado de la necesidad de tener una idea política. Del marxismo leninista, hasta por el trotskismo, qué infantil era, llegué al socialismo. ¡Y en qué momento! En plena contestación política de la izquierda contra el aznarismo en el poder.

Y en eso, hubo un mitin en mi barrio, Aluche, donde vinieron los dos candidatos y también un candidato a la Asamblea que era también del mismo distrito, de Latina. Era José Cepeda. Aún recuerdo perfectamente aquel “vamos a llenar de puños y rosas las urnas”. ¡Y vaya si lo conseguimos! Tanto que el PSOE ganó aquellas elecciones. Lo triste vino después.

Pero, en aquel momento, yo me decanté definitivamente por el Partido Socialista. Era un gran discurso, la gran izquierda, el gran proyecto integrador por España y por Madrid. Y Cepeda, alguien que no es un político más, sino un vecino mío más. Y lo que pensaba me llegó.

Pasó mucho, hasta, lo recuerdo bien, el 2 de Febrero de 2006, cuando acudí a las Juventudes de mi distrito, a afiliarme. Tenía, al revés que mucha gente, una concepción de la política positiva. Pensaba, y pienso, que mucha gente sirve sin molestarse en tener unas ambiciones personales negativas. El Socialismo es algo superior, es la unión por hacer un mundo más justo. Y yo iba a poner mi particular grano de arena.

Pero, no pasaron muchos meses, hasta que desde la dirección regional de las Juventudes, desde su Secretaría de Organización, se montó, con prácticas detestables y en nada éticas, una moción de censura contra una ejecutiva elegida ¡un mes antes! Fue un tremendo jarro de agua fría, un despertar de mi ceguera. Porque, ¡resultaba que sí había gente despreciable en la política! Y no desde lo más alto, sino desde la escala más pequeña, incluso desde una organización juvenil cuyo principal propósito es ser el vehículo conductor de los problemas de los jóvenes según el socialismo.

Qué gran decepción, sinceramente. Se me partió el corazón, porque en las Juventudes, mis Juventudes, y en el Partido, mi Partido, que con todo mi corazón amo porque son la mayor obra que pudo hacer Pablo Iglesias por los trabajadores españoles, ¡había manzanas podridas en su interior!

Con mucho esfuerzo, de todos los que participábamos de dirigir las Juventudes de mi distrito, conseguimos tumbar aquel despropósito, y esos despreciables, habían recibido lo que merecían: la derrota. Las Juventudes, como Cádiz bajo la invasión francesa, habían resistido.

Y al año siguiente, tocó un proceso congresual en las Juventudes Socialistas de Madrid. Óscar Blanco dejaba la Secretaría General. Yo, que en entre 2006 y 2007 me dediqué a pensar únicamente en mi trabajo local, de cara a mis vecinos, no había reparado en nada más allá de Latina. Algún acto genera y poco más, pero, tonto de mi, pensaba que todo era igual de feliz que en Latina. Por eso, cada vez que alguien dice algo en contra de mi agrupación, pienso: “¿Pero, de qué va? Si nuestro trabajo, nuestra actividad, nuestra relación, es exquisita. Personalmente creo que el demérito propio crea resentimiento al mérito ajeno.

Volviendo al Congreso de 2007, se postulaba un único candidato a la Secretaría General: Daniel Méndez, el mismo Secretario de Organización que había orquestado la fracasada moción de censura. Estaba claro que, por coherencia, no se podía apoyar a una persona así. Pero ya reveló lo que ahora sigue siendo un constante de él: engañar. Y nos engañó, sí, tontos de nosotros. Pensábamos que había aprendido la lección y que ahora ejercería una labor exquisita. Le dimos los avales que necesitaba para postularse como candidato porque pensábamos que reconocería el peso y la labor de mi agrupación. ¡Pobre ilusos! Nada, absolutamente nada. Claro, y hay que reconocer, que nos ofreció un puesto florero, de no hacer nada y de callarnos la boca. Y claro, ya más tontos no fuimos. Y así, una de las agrupaciones de mayor actividad y mayor peso se quedó fuera.

Daba igual que nos dejáramos todo por los jóvenes de nuestro distrito, daba igual que estuviéramos siempre donde fuera necesario. Nuestro trabajo daba igual, porque, entre la ambición personal y el mérito colectivo, la inquina personal puede más. Ya digo que el mérito ajeno crea resentimiento.

Aún así, no nos rendimos. Continuamos con nuestra labor local, elegimos una nueva ejecutiva local y un nuevo Secretario General, pero el resentimiento hacia nuestra agrupación no cesó. Daba igual quien estuviese, porque era un enemigo a batir. Nosotros, por nuestra parte, conservamos la desconfianza hacia el aparato regional pero no hemos hecho nada desestabilizador, dimos la oportunidad de enmendar los viejos errores.

Pero nada, los grandes esfuerzos de las Juventudes de Madrid se dirigieron a asegurar unos cuantos puestos en las listas electorales en las elecciones generales. ¿Para qué? Para dar sillones. Todos los esfuerzos en dar sillones, cargos y prebendas a quien baile el agua. El mérito, y el trabajo, brillan por su ausencia.

Como resulta que quien ejerce una política basada en el reparto de cargos y premios, sin ningún proyecto ni ideas, pues es lógico que comiencen las desafecciones. Y poco a poco ha ido un pequeño goteo de críticas a la dirección. ¡Latina mantenía la coherencia! Y, además, todas las críticas son lo mismo que Latina mantenía: Daniel Méndez es un mafioso.

Aquí termina la historia, en el momento presente. Así, se explica el origen de las dos listas: una oficial, y otra crítica. Y la propia coherencia de Latina, que ha sido dedicarse por entero a su trabajo local, a buscar la integración y redimir a la ejecutiva regional de sus errores, y a mantener una postura crítica por los malos usos de las Juventudes de Madrid. Como desde la ejecutiva regional no se ha querido abrir los ojos, al final resulta que cuánto más caminas en el error más solo te quedas.

Sin meterse en el posicionamiento ideológico de otras agrupaciones, de su actuación interna, Latina se presenta como la coherencia misma, y es que el buen hacer no debe divorciarse de la política, porque eso representa frustrar las esperanzas tanto de los miles de militantes que trabajan por ella a cambio de nada y a millones de españoles que ansían una izquierda limpia y fuerte.

Yo creo que José Cepeda hizo muy bien en presentarse como alternativa tras la derrota de Rafael Simancas. El PSM, tras la traición de Tamayo, se vio privado de su autonomía para poseer un control excesivo por parte del PSOE federal, que, en este caso, no ha tenido buena mano. Los resultados del PSM son horrorosos, el discurso, aquel discurso que oí el 2003, se había evaporado. Ahora todo era el rencor, el rencor por la traición de Tamayo y la imposibilidad de llegar al poder.

Y Cepeda, aunque no ganara frente a Tomás Gómez, representa ese PSM de las bases que no quiere que le hagan un no-discurso, un socialismo derechista para caer bien a los poderosos a ver si así nos deja gobernar, un hacer y deshacer desde Ferraz sin tener en cuenta las bases de Madrid: por eso se perdió en 2007. Simancas, en su momento, en 2003, lo hizo bien: se acabó la mayoría absoluta conservadora. Simancas, al perder la oportunidad, lo hizo mal: se agarró al cargo y perdió el discurso. Y Cepeda lo que quería es volver al proyecto, porque desde la izquierda se gana Madrid. Y ni Simancas supo tener un discurso convincente en 2007 y espero que Tomás Gómez sea capaz de ofrecer un discurso que pueda llevar al PSM a donde le corresponde, que es a la Puerta del Sol a presidir Madrid.

Y tanto lo que pido al PSM, como a las JSM, es recuperar el discurso y el proyecto. Y algo muy importante: deshacerse de todos aquellos que nos rompen el corazón y la ilusión de una izquierda fuerte y convincente. Así, como lo he escrito en otro sitio, exclamo: ¡Daniel Méndez, rectifica!

Nuestra conciencia es lo último que nos quedará, y es la única a la que debemos tener lealtad. Yo la guardo, ¿y los demás?

Vacaciones


El Árbol Socialdemócrata se va de vacaciones por diez días. Diez días para desconectar de todo, descansar, tomar el sol y pasarlo bien, alejado de todo lo que pase, que se necesita para volver con más energía y más espíritu crítico. Vuelvo el 28, así que pronto habrá de nuevo posts socialdemócratas.

¡Os deseo buenas vacaciones!

lunes, 14 de julio de 2008

Cesarismo


Os invito a participar de una reflexión.

En el siglo XIX conocimos el fenómeno del cesarismo democrático. Su paradigma fueron los Imperios franceses de Napoleón I y Luis Napoleón, regímenes profundamente autoritarios revestidos de una supuesta legitimidad popular. Napoleón I sometió a plebiscito su régimen, volvió al sufragio universal, dio instituciones decorativas, pero todo con el “apoyo” popular. Luis Napoleón eliminó la II República Francesa, volvió a crear esas mismas instituciones decorativas con el sufragio universal, fue sometiendo su régimen continuamente a varios plebiscitos de conocido resultado. Sus imitadores, que no llegan ni a la suela de los zapatos de los Bonaparte, que, al menos, tacto político tenían, fueron las dictaduras latinoamericanas, sobre todo.

Todos, regímenes personales; todos, otorgados por la “voluntad” popular. La ficción de que el pueblo decide, que el pueblo gobierna, que el pueblo delega toda decisión a una sola persona, ratificado periódicamente.

¿Seguirá existiendo?

Porque, he aquí la pregunta, ¿gobierna el pueblo? ¿Existe realmente la soberanía popular?

O más bien, ¿es el pueblo engañado cada poco tiempo para otorgar la legitimidad a unos representantes con su voto? ¿Y son realmente esos a quienes se “delega” el poder verdaderos representantes?

Puede que todo no sea más que una serie de jerarquías con intereses definidos que luchan por alcanzar el poder para sus fines, engañando a la ciudadanía con simples promesas que cumplen para acallar bocas y seguir con su reparto del pastel. El clientelismo alcanza su máxima expresión con el acceso al poder y el reparto de prebendas como premio a todo aquel que ha colaborado en apoyar a las jerarquías en su camino al poder, convirtiéndose de facto en parte de la jerarquía y un parásito del poder, sin más oficio ni beneficio.

Así pues, ¿es posible que los ciudadanos abran los ojos y se sacudan de estas jerarquías? Da igual régimen: feudalismo, liberalismo, democracia… siempre hay unas jerarquías luchando por el poder, y la masa es su instrumento. ¿Podrán los ciudadanos elegir a los optimus, a aquellos que sean merecedores por el mérito, el conocimiento y unas ideas de futuro, de administrar esa delegación de la soberanía?

¿En realidad quieren las personas guerras, expulsiones, odios y mentiras? ¿O es que esas jerarquías intrigan y pergeñan una serie de mentiras para lograr sus fines y sus intereses?

No tendremos optimus, tendremos optimates.

Rectificación

Errar es de humanos y rectificar es de sabios, dice el dicho. Como yo mismo le digo a David, espero algún día alguna autocrítica suya, ya que, por criticar a todo, por qué no criticarse a uno mismo. Así que me aplico el cuento y me critico de haber leído mal la convocatoria de las Juventudes y donde leí 14 eran las 14.00h del día 16. Espero que se me perdone por tener bastante miopía y estar condenado de por vida a llevar gafas. El error y la rectificación nos honra.

Pero la cuestión central no es esa, ésta, como diría Fraga, es una “menudencia”. Aunque me llama la atención que no vayan a aceptar, como ponen, enmiendas de última hora, como sí se ha hecho en anteriores ocasiones, máxime cuando sigo pensando que los plazos son mínimos por la dificultad de elaborar enmiendas en período estival, con muchos compañeros disfrutando de las merecidas vacaciones.

La cuestión central es toda mi crítica al PSM y a JSM, de lo que no rectifico, porque, tomando el lema de la pasada campaña electoral, “hay motivos”. Y hay motivos para seguir creyendo punto por punto toda mi crítica. Preferiría equivocarme en esto más que en lo anterior, porque me parte el corazón que los esfuerzos de miles de compañeros se dilapiden en ambiciones personales sin proyecto.

Lo que pretendo, con esto, es invitar a la reflexión personal. No sólo basta reconocer el error, hay que rectificar. Como yo mismo también estoy sometido a poder equivocarme, creo que es una obligación rectificar. Y no pasa nada. Y lo mismo invito a todo aquel aludido. Rectificad. Y no pasará nada. Y os habréis honrado a vosotros mismos y a vuestros compañeros. Es más, como dije al empezar mi blog, está abierto a todo comentario, a toda réplica, dentro de la educación. Si se quiere rebatir lo que escribo, por favor, hacedlo. Si no, entiendo el silencio como afirmación.

Si no yo gano nada criticando. Es más, pierdo; y perdemos todos. Pero, ¿cómo podremos criticar los errores ajenos si no nos vemos los propios primero? Esta crítica no es una crítica vacía de contenido, es una crítica constructiva. Os invito a la reflexión. No sólo está en juego los ideales de muchos compañeros, está en juego la confianza que millones de personas nos depositan para luchar por ellos. Ése es el único objetivo del socialismo, y no el interés propio.

sábado, 12 de julio de 2008

No hay más ley que mi capricho

Como puse anteriormente, Leopoldo Alas, Clarín, escribió una vez en “El Solfeo”: “Y el cacique demostró con sus hechos aquel dicho: no hay más ley que mi capricho, aquí el Estado soy yo. Él sirve de providencia y es juez en última instancia, todo pleito él lo sustancia, toda causa él la sentencia. Él engendra diputados y distribuye estanquillos…” qué razón, cuánta razón tenía en su época. Y, por desgracia, cuánta razón sigue teniendo hoy en día.

Porque las Juventudes Socialistas de Madrid pecan de estos defectos. Se convocó el Comité Regional extraordinario para enmiendas y delegados al Congreso del PSM el pasado día Viernes 11, para celebrarlo el próximo día Domingo 20. Asimismo, el límite de presentación de las enmiendas al texto de la Ponencia Marco expira para las JSM el Lunes 14. Teniendo en cuenta que hoy se ha publicado la Ponencia Marco, sin enviarlo a ningún compañero de las JSM, sería muy difícil ponerse a trabajar cuanto antes por falta de información. No es solo falta de información, es desidia. Tampoco hay que dirigir exclusivamente la crítica a la dirección de las JSM, los plazos dados por el PSM, convocando el Congreso justo después del verano y obligando a los procesos locales y regionales en época de vacaciones, es una forma de coartar la participación masiva en los órganos del Partido y de las Juventudes.

Muchos, al empezar jóvenes a militar en las Juventudes, guardábamos amplios ideales, una energía infinita por participar, por ayudar, por darlo todo para el proyecto. Creíamos que las Juventudes serían un paraíso de la honestidad, puesto que estamos mucho más apartados del aparato del poder. Creíamos. Decía Lord Acton: “El poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente”. Toda la razón.

Con el tiempo, observando todas las triquiñuelas, toda ambición huérfana de ideas, todo personalismo superlativo y tanto trepismo descarado, nos preguntamos: “¿dónde quedaron las ideas de la izquierda? ¿Cuándo fue abandonado la preocupación en la sociedad, intercambiado por una preocupación de “qué hay de lo mío”?

Con el tiempo, nos hemos ido desencantado y entristeciendo. Pero no nos hemos rendido. Por mucho que haya caciques haciendo y deshaciendo a su antojo en las Juventudes, por mucho silencio que hagan a los que se dejan todo por un proyecto, por unas ideas, no nos hemos rendido.

Ante todo, por lo que haga o deje de hacer la dirección regional de JSM, más preocupada por buscar un hueco en las listas electorales a las Cortes Generales que a darse visibilidad a una juventud madrileña en manos de la derecha, nosotros no nos rendiremos. Pero, ¿qué visibilidad puede haber sin ni siquiera existir un proyecto que ofrecer? La labor de las agrupaciones locales no está tenida en cuenta, y, si alguna es molesta, se organiza una moción para tumbar a sus dirigentes o se niega su constitución, como en el caso de otras. Incumpliendo estatutos, además.

Como jóvenes de entre los jóvenes, creíamos que el mérito era la medida en tu sitio dentro del organigrama. Ni qué decir que qué craso error. Si resulta que no es el mérito sino el compincheo y el interés personal. No importa que la ejecutiva se pueda llenar de gente sin mérito, porque no medirán su éxito por logros tales como la influencia de las Juventudes en los jóvenes madrileños, sus campañas y sus protestas, sino que lo medirán basándose en si han conseguido o no sus objetivos personales, que pueden ser resumidos en una palabra: cargos. No hace falta ya proceder de la vida profesional a la vida pública: se pasa directamente a la vida pública, es el único oficio y beneficio que muchos conocen. Es toda una novedad, ¡la organización juvenil de un partido llamado obrero controlado por quien no tiene más experiencia que haber empezado la universidad!

Tendremos unas JSM ineficaces, desaparecidas, al mismo tiempo que un PSM ineficaz y desaparecido. Nosotros queremos que Tomás Gómez, aunque guste a unos más y a otros menos, sea un líder de la oposición fuerte, con un proyecto alternativo serio, y sea visto, y conocido por los madrileños. Pero es que nada de esto existe, y el PSM ha hecho lo que peor puede hacerle a Madrid: dejar a Aguirre sin oposición para que ponga en marcha su perverso proyecto neoliberal. Antes de que fulano o mengano sean tal o tal cosa en las Juventudes y el Partido, lo que exigimos es convicción, fuerza y proyecto, y no personalismos, desidias e insidias. Porque hacer desaparecer el socialismo de Madrid, es trabajar contra el socialismo en Madrid.

domingo, 6 de julio de 2008

El equipo para el nuevo ciclo


La promoción de Leire Pajín a Secretaria de Organización es una buena noticia y regocijo para el socialismo. El relevo ha sido intenso, y de los nuevos secretarios de área sobresalen María del Mar Moreno, ex presidenta del Parlamento andaluz y Jesús Caldera, en Ideas y Proyectos, para encargarse de la nueva “fábrica de ideas” del socialismo, que esperemos que se materialice pronto.

“Le cuestionan (a Tomás Gómez) aquellos que llevan bastante tiempo perdiendo elecciones, él, por cierto, las gana y con un respaldo muy considerable”, dijo Blanco en Tiempo. Sí, le cuestiona el PSM, el mismo partido que pierde elecciones desde 1995. Pero le cuestionan las bases, frente a las cúpulas que son las que hacen perder las elecciones. Las bases están muy hartas de que el PSM sea el partido perdedor. Y Tomás Gómez es alcalde de Parla con el apoyo del 75% de sus ciudadanos, pero Parla no es el resto de la región de Madrid. Tomás Gómez tampoco es diputado regional y no puede dirigir la batalla dialéctica parlamentaria contra Aguirre. ¿Así se ganan elecciones? No. Aunque si llegara a ganarlas con este método de perdedor me quito el sombrero ante Blanco.

No sé qué pensar que José Blanco sea vicesecretario general. Por un lado, me genera simpatía, será por cosas del país de Breogán. Por otro, sus comentarios acerca del PSM no me producen más que risa: el PSM pierde elecciones, sí, pero los candidatos son los que pone Ferraz. ¿Se han ganado las elecciones con ese método? No. ¿Se ha perdido autonomía del PSM frente al federal? Sí, por desgracia. Vicesecretario general ya es, pero como Alfonso Guerra creo que no.

El nuevo equipo del PSOE debe enfrentarse a, como digo, un nuevo ciclo. Un nuevo ciclo en muchos sentidos: la economía, y mantener íntegros los apoyos del socialismo, amén de quebrar los del partido conservador.

Y, ¿por qué no? mirar dentro de casa en las escalas inferiores, cimentadas en un trepismo que puede hundir al partido. Porque si al menos fuera gente con unas ideas firmes, claras y ganadoras, pues si la ética debe dar paso a otras vías… a ver qué pasa. Pero como no tienen más idea que la promoción personal, así no se va a ninguna parte. La verdad es que cansa ya alertar de los peligros del futuro, predicando en el desierto. Espero y mucho equivocarme.

viernes, 4 de julio de 2008

Sobre el caciquismo de la Restauración canovista

“Y el cacique demostró con sus hechos aquel dicho: no hay más ley que mi capricho, aquí el Estado soy yo. Él sirve de providencia y es juez en última instancia, todo pleito él lo sustancia, toda causa él la sentencia. Él engendra diputados y distribuye estanquillos. Yo defino así al cacique: un Cánovas en pequeño, un ministro, en conclusión, es un cacique muy grande”.

El Solfeo
Leopoldo Alas, Clarín

Ingrid libre


Gracias a Dios, y a la intervención militar colombiana, que Ingrid Betancourt está al fin, tras seis largos y duros años de cautiverio, libre. Libre de esos terroristas asesinos y narcotraficantes de las FARC, revestidos de un marxismo de hojalata, abdicando de esos principios por algo más rentable, las drogas.

Pero por fin, Ingrid es libre. Francia, Colombia, y el resto del mundo, nos alegramos profundamente desde lo más profundo del corazón por este triunfo frente al horror.

miércoles, 2 de julio de 2008

Economía de izquierdas


Sí, señor Rajoy, hay políticas económicas de izquierdas y de derechas. De derechas como su gobierno perdedor: decretazo, congelación de salarios y pensiones, liberalización masiva, privatización de empresas públicas regaladas a los amigos del colegio, crecimiento basado en la construcción, empleo de baja calidad y temporal… ¿seguimos? Políticas económicas de izquierdas: crecimiento basado en el empleo, en la extensión de las garantías sociales, subida de las pensiones, ayudas a las familias con personas dependientes, regularización y cotización de inmigrantes claves para el crecimiento, empleo indefinido, reparto de las riquezas generadas… ¿seguimos?

Tenemos suerte que, en la crisis mundial del capitalismo, tengamos un gobierno de izquierdas. Porque, ¿qué nos ofrece la oposición? Recortes sociales, deuda masiva (ejemplo Comunidad de Madrid), más de lo mismo que en el período 1996-2004. Y no, no debemos permitir el recorte social de las inversiones públicas.

Modelo socialdemócrata, ha dicho Zapatero. De lo que dijo, lo más claro, porque lo demás es difícilmente entendible para el ciudadano de a pie.

Lo que sigue muy claro es que no podemos quedarnos de brazos cruzados frente a las crisis capitalistas. Hay que ofrecer una alternativa socialista al capitalismo.

Sortear la censura

Para sortear, una vez más, la censura de Minuto Digital en la noticia que comenté por última vez ayer, y hoy lo intento de nuevo, para replicar a otro de sus lectores.

Que la ignorancia ciega no nos permita ver el origen y el comportamiento de los nacionalismos. ¿Queréis ver por qué los nacionalistas de uno y otro lado destilan odio? Que comprendan que es el quid de su existencia.

¡Buscad en la historia! ¡Buscad el por qué del nacionalismo periférico!


martes, 1 de julio de 2008

Renovación, ¿ah, sí?


Trillo. Oír Trillo es oír, aparte del célebre “mandahuevos”, Yakolev, región hortofrutícola pacífica sobre Irak, "viva Honduras"… pero, ¿renovación? Ni se me ocurriría.

¿Este es el nuevo partido conservador? Rajoy, Ana Mato, Trillo, Gallardón, Aguirre… son más bien todos productos del pasado aznarista, bañados con un centrismo de capa, al que, como dijo una vez José Cepeda, rascando se llega a un azul bastante semejante al azul facha.

¿Qué es lo que dijo Rajoy sobre la crisis? Ah, que había que hacer recortes sociales… pues vaya, con la renovación del PP, siguen igual de antisociales como siempre: que paguen menos los ricos, y que vivan peor los pobres. Hala, para pensarse si hay que permitir que gane un conservadurismo vestido de centrismo.

Pero ya se sabe: aunque la mona se vista de seda…

Muy bien por Fausto


Aunque haya que levantar la voz, todo sea en sede parlamentaria por sacar los colores a Esperanza Aguirre, que no ha explicado el por qué de su cambio de gobierno. Bulos que no nos hemos tragado sí ha dado, ahora queremos la verdad: sus ánimos de venganza.

Y Fausto Fernández no se ha comido la lengua a la hora de levantar la voz en una cámara dormida y sin oposición visible contra Aguirre, ya que el supuesto jefe de la oposición se halla fuera de la Asamblea. Y callado, además.

Tenemos cosas cómicas como que el nuevo portavoz del PP (nos vamos a quedar sin la lengua sibilina y envenenada de Beteta), en vez de explicar la postura de su partido sobre la cuestión del pleno (votar a dos senadoras del PP), hizo de “tercera cámara nacional” para hacer de oposición al Gobierno. Si sabemos que Rajoy no le quieren en su partido, pero ahora que el sector crítico haga una segunda oposición independiente… no tiene precio. Una cosa sí tiene razón el nuevo portavoz: la izquierda, pero eso sí, la izquierda de las cumbres y dirigentes, no tiene ideas. Es cierto, las ideas están en la base, a la espera de imponer la fuerza arrolladora del socialismo que sus dirigentes regionales bloquean.

Pues. ¿qué más les da oposición que gobierno, si ya tienen un puesto y clientela? A los ciudadanos no les da lo mismo.

http://www.elpais.com/articulo/madrid/cara/perro/Asamblea/elpepuespmad/20080701elpmad_5/Tes