Resultados:
2009
PP: 42,2% y 23 diputados
PSOE: 38,5% y 21 diputados
IU: 3,7% y 2 diputados
UPyD: 2,9% y 1 diputado
CEU: 5,12% y 2 diputados
EdP: 2,5% y 1 diputado
2004
PP: 41,2% y 24 diputados
PSOE: 43,4% y 25 diputados
IU: 4,15% y 2 diputados
Galeusca: 5,15% y 2 diputados
EdP: 2,45% y 1 diputado
Con una participación levemente superior a las elecciones europeas del 2004, del 46%, lo primero es constatar el hecho de la mínima asistencia a las urnas. Estados Unidos tiene índices parecidos en la mayoría de sus elecciones, pero en Europa esto es muy grave. La construcción europea se realiza con menos de la mitad de ciudadanos manifestando su opinión electoral.
En España, los datos deben ser analizados con rigor y profundidad para evitar la más mínima manipulación. El Partido Socialista ha perdido las elecciones por 3,7 puntos de diferencia. ¿Es éste el temido voto de castigo o un cambio de ciclo electoral? Si queremos ver un voto de castigo hay que ir al Reino Unido, donde los laboristas han quedado en tercer lugar. Eso es un voto de castigo. Si queremos ver “victorias” en otros países veamos Francia: 28% para la UMP. En Italia, 35% para Berlusconi. En Reino Unido: 28% para el Partido Conservador. En Suecia el 25% para los Socialdemócratas. Incluso la gran victoria socialdemócrata en Dinamarca es con el 21%. Realmente, la victoria porcentual del Partido de los Presuntos en España es mucho más considerable que los de esos partidos. Pero sus victorias son incontestables en sus países.
En España el Partido Socialista ha aguantado el tipo, con el 38,5% de los votos. Para ser un partido de Gobierno castigado en las elecciones, el castigo ha sido una colleja. Si en Reino Unido el Labour se ha quedado con el 15%, en Irlanda el Fianna Fáil con el 25%, en Portugal el PS con el 26% o en Holanda la democristiana CDA el 20%... quedan dos visiones de las elecciones en España: o los ciudadanos son más serios para castigar al Gobierno, muy levemente, con un débil toque de atención; o los ciudadanos no saben votar. Ésa última es la conclusión general de la derecha mediática desde 2004 para contestar a las victorias socialistas, y yo me quedo con la primera, que es más racional.
Los castigos electorales con las europeas luego no se corresponden generalmente con las elecciones legislativas o presidenciales de los países miembros. El PS portugués sigue encabezando los sondeos para las legislativas, el Labour británico caerá pero no a un resultado tan ridículo, los Socialdemócratas suecos aún tienen mucho trabajo para volver al Gobierno de su país. Y Berlusconi…
Con Berlusconi, incluso hay que decir que ha sido levemente castigado. Eso es un toque de lucidez que quizás diga que Italia no está entregada a sancionar la corrupción o el comportamiento berlusconiano. En España, sobre todo Madrid o Valencia, no parece haber lo mismo, o quizás los madrileños y valencianos se lo guardan… hasta que sus respectivos PS se lo merezcan.
Con la corrupción, es muy grave para la democracia que una gran parte de la ciudadanía renuncie al castigo. ¿Aceptan la corrupción? Pues que roben de otro dinero, pero no del dinero público. Pero como he dicho antes, no habrá cambios hasta que Exista un Cambio.
Así las cosas, el PP no ha tenido los resultados de 1994, con un 40% frente a un 30% de los socialistas. Malévolamente, piensan los socialistas que estas elecciones acallan la oposición interna a Rajoy, y que una tercera candidatura de Rajoy a las elecciones será una nueva victoria socialista. Aguirre pedía unos resultados como los del 94, otros decían que la gran victoria vendría con cinco puntos de ventaja. 3,7 puntos de diferencia son una victoria pírrica, un resultado que, como el de las municipales, no tienen por qué indicar el cambio de ciclo. La visión de botes en Génova es una gran sobreactuación, un necesario regalo para los cachorros de la derecha, pero oculta una gran insatisfacción.
Para el PSOE, las elecciones no son un trauma. Pero sólo se vencerá al impulso conservador buenos datos económicos y de empleo en el futuro. Tampoco vale esperar que “voten los nuestros”. Hay que ganarlos. Entender por qué mucha gente puede votar a los conservadores cuando también podría hacerlo por los socialistas. La izquierda tendrá que ofrecer más eficacia e iniciativa en lo que resta de legislatura, como bien ofreció Zapatero en el debate sobre el Estado de la Nación.
Para los pequeños partidos, IU mantiene su línea descendente, del 4,1% en las europeas del 2004, el 3,8% en las generales de 2008 y ahora el 3,7%. La llegada de Cayo Lara y una nueva dirección controlada férreamente por los comunistas no ha dado el impulso que esperaban, de crecer a costa del PSOE en castigo por la crisis económica. Pierden 60.000 votos, seguramente 25.000 de ellos han ido al partido de la Izquierda Anticapitalista, que se marcó como objetivo recibir votos de IU. En Euskadi su resultado es mínimo: 1,8% de votos. Ésa es la respuesta por venderse al nacionalismo.
UPyD dobla su porcentaje de votos, del 1,2% de las generales al 2,9% de las europeas, ganando más de cien mil votos y obteniendo un eurodiputado. Es de suponer que Sosa Wagner vaya a integrar el Grupo Liberal y Reformista europeo. De todos modos, su poder electoral aún es escaso, muy fuerte en Madrid pero muy débil en Cataluña. En Cataluña, sin embargo ha superado a Ciudadanos, integrado en Libertas, que ha recibido en toda España apenas 23.000 votos, por debajo de la Izquierda Anticapitalista y Por un Mundo más Justo. Sin embargo, en 30 capitales de provincia es la tercera fuerza, por delante de Izquierda Unida.
Los nacionalistas permanecen estancados en sus cotas mínimas. La Coalición por Europa, la unión conservadora del nacionalismo tiene el 5% de votos, lejos de los resultados que antaño obtenían CiU o el PNV. Apenas 7.000 votos distancian a la CEU del PSOE, ganando únicamente en Vizcaya a los socialistas. Europa de los Pueblos permanece también estancada, en Euskadi con unos resultados del 5%, por debajo de los castellanistas proabertzales de Iniciativa Internacionalista. En Cataluña el 9%, dos puntos menos, y en Galicia tres puntos menos, también con el 9%.
En definitiva, España ha votado cambios mínimos y enviará al Parlamento Europeo diputados europeístas, democráticos y moderados, sin candidaturas radicales o ultras como otros países europeos. Europa gana en España.
PD: lo que más me gusta de las elecciones es poder trabajar directamente para la democracia como interventor, ayudando a la mesa, observando el hermoso arte de votar y la satisfacción de contar votos, sean a la lista que sean.
2009
PP: 42,2% y 23 diputados
PSOE: 38,5% y 21 diputados
IU: 3,7% y 2 diputados
UPyD: 2,9% y 1 diputado
CEU: 5,12% y 2 diputados
EdP: 2,5% y 1 diputado
2004
PP: 41,2% y 24 diputados
PSOE: 43,4% y 25 diputados
IU: 4,15% y 2 diputados
Galeusca: 5,15% y 2 diputados
EdP: 2,45% y 1 diputado
Con una participación levemente superior a las elecciones europeas del 2004, del 46%, lo primero es constatar el hecho de la mínima asistencia a las urnas. Estados Unidos tiene índices parecidos en la mayoría de sus elecciones, pero en Europa esto es muy grave. La construcción europea se realiza con menos de la mitad de ciudadanos manifestando su opinión electoral.
En España, los datos deben ser analizados con rigor y profundidad para evitar la más mínima manipulación. El Partido Socialista ha perdido las elecciones por 3,7 puntos de diferencia. ¿Es éste el temido voto de castigo o un cambio de ciclo electoral? Si queremos ver un voto de castigo hay que ir al Reino Unido, donde los laboristas han quedado en tercer lugar. Eso es un voto de castigo. Si queremos ver “victorias” en otros países veamos Francia: 28% para la UMP. En Italia, 35% para Berlusconi. En Reino Unido: 28% para el Partido Conservador. En Suecia el 25% para los Socialdemócratas. Incluso la gran victoria socialdemócrata en Dinamarca es con el 21%. Realmente, la victoria porcentual del Partido de los Presuntos en España es mucho más considerable que los de esos partidos. Pero sus victorias son incontestables en sus países.
En España el Partido Socialista ha aguantado el tipo, con el 38,5% de los votos. Para ser un partido de Gobierno castigado en las elecciones, el castigo ha sido una colleja. Si en Reino Unido el Labour se ha quedado con el 15%, en Irlanda el Fianna Fáil con el 25%, en Portugal el PS con el 26% o en Holanda la democristiana CDA el 20%... quedan dos visiones de las elecciones en España: o los ciudadanos son más serios para castigar al Gobierno, muy levemente, con un débil toque de atención; o los ciudadanos no saben votar. Ésa última es la conclusión general de la derecha mediática desde 2004 para contestar a las victorias socialistas, y yo me quedo con la primera, que es más racional.
Los castigos electorales con las europeas luego no se corresponden generalmente con las elecciones legislativas o presidenciales de los países miembros. El PS portugués sigue encabezando los sondeos para las legislativas, el Labour británico caerá pero no a un resultado tan ridículo, los Socialdemócratas suecos aún tienen mucho trabajo para volver al Gobierno de su país. Y Berlusconi…
Con Berlusconi, incluso hay que decir que ha sido levemente castigado. Eso es un toque de lucidez que quizás diga que Italia no está entregada a sancionar la corrupción o el comportamiento berlusconiano. En España, sobre todo Madrid o Valencia, no parece haber lo mismo, o quizás los madrileños y valencianos se lo guardan… hasta que sus respectivos PS se lo merezcan.
Con la corrupción, es muy grave para la democracia que una gran parte de la ciudadanía renuncie al castigo. ¿Aceptan la corrupción? Pues que roben de otro dinero, pero no del dinero público. Pero como he dicho antes, no habrá cambios hasta que Exista un Cambio.
Así las cosas, el PP no ha tenido los resultados de 1994, con un 40% frente a un 30% de los socialistas. Malévolamente, piensan los socialistas que estas elecciones acallan la oposición interna a Rajoy, y que una tercera candidatura de Rajoy a las elecciones será una nueva victoria socialista. Aguirre pedía unos resultados como los del 94, otros decían que la gran victoria vendría con cinco puntos de ventaja. 3,7 puntos de diferencia son una victoria pírrica, un resultado que, como el de las municipales, no tienen por qué indicar el cambio de ciclo. La visión de botes en Génova es una gran sobreactuación, un necesario regalo para los cachorros de la derecha, pero oculta una gran insatisfacción.
Para el PSOE, las elecciones no son un trauma. Pero sólo se vencerá al impulso conservador buenos datos económicos y de empleo en el futuro. Tampoco vale esperar que “voten los nuestros”. Hay que ganarlos. Entender por qué mucha gente puede votar a los conservadores cuando también podría hacerlo por los socialistas. La izquierda tendrá que ofrecer más eficacia e iniciativa en lo que resta de legislatura, como bien ofreció Zapatero en el debate sobre el Estado de la Nación.
Para los pequeños partidos, IU mantiene su línea descendente, del 4,1% en las europeas del 2004, el 3,8% en las generales de 2008 y ahora el 3,7%. La llegada de Cayo Lara y una nueva dirección controlada férreamente por los comunistas no ha dado el impulso que esperaban, de crecer a costa del PSOE en castigo por la crisis económica. Pierden 60.000 votos, seguramente 25.000 de ellos han ido al partido de la Izquierda Anticapitalista, que se marcó como objetivo recibir votos de IU. En Euskadi su resultado es mínimo: 1,8% de votos. Ésa es la respuesta por venderse al nacionalismo.
UPyD dobla su porcentaje de votos, del 1,2% de las generales al 2,9% de las europeas, ganando más de cien mil votos y obteniendo un eurodiputado. Es de suponer que Sosa Wagner vaya a integrar el Grupo Liberal y Reformista europeo. De todos modos, su poder electoral aún es escaso, muy fuerte en Madrid pero muy débil en Cataluña. En Cataluña, sin embargo ha superado a Ciudadanos, integrado en Libertas, que ha recibido en toda España apenas 23.000 votos, por debajo de la Izquierda Anticapitalista y Por un Mundo más Justo. Sin embargo, en 30 capitales de provincia es la tercera fuerza, por delante de Izquierda Unida.
Los nacionalistas permanecen estancados en sus cotas mínimas. La Coalición por Europa, la unión conservadora del nacionalismo tiene el 5% de votos, lejos de los resultados que antaño obtenían CiU o el PNV. Apenas 7.000 votos distancian a la CEU del PSOE, ganando únicamente en Vizcaya a los socialistas. Europa de los Pueblos permanece también estancada, en Euskadi con unos resultados del 5%, por debajo de los castellanistas proabertzales de Iniciativa Internacionalista. En Cataluña el 9%, dos puntos menos, y en Galicia tres puntos menos, también con el 9%.
En definitiva, España ha votado cambios mínimos y enviará al Parlamento Europeo diputados europeístas, democráticos y moderados, sin candidaturas radicales o ultras como otros países europeos. Europa gana en España.
PD: lo que más me gusta de las elecciones es poder trabajar directamente para la democracia como interventor, ayudando a la mesa, observando el hermoso arte de votar y la satisfacción de contar votos, sean a la lista que sean.
8 comentarios:
Hay una cosa que se te escapa. Los que han votado son la base solida de cada partido, las ovejitas que votan si o si, no es un voto de eleccion, es un voto fijo, inamovible.
No ha votado el 20% que decide las elecciones, supongo que no ha votado la gente de "centro", los desganados o avergonzados de lo que se ha hecho.
Se sigue sin hablar de Europa en los medios, ni se habla de los resultados, solo se extraen conclusiones "nacionales", mal viso...
Me parece mas interesante lo de en que ha fallado la socialdemocracia europea, cayendo incluso donde no gobierna.
Por que en medio de una crisis tan voraz no crece el PSE ni la Izquierda (poco significativo) y, sin embargo, se consolida el modelo atroz del centro-derecha y surgen los nacionalismos apestosos que vienen directamente a reventar Europa...
Menos populismo y menos foto les pediria a los lideres socialdemocratas y que se remangaran las camisas para hacer "progresar" de verdad a la poblacion.
Me preocupa especialmente lo que ha pasado en Francia, en Italia e incluso en Uk con los socialistas... vienen tiempos revueltos...
Un saludo.
El análisis que haces me reafirma en la opinión de que este resultado es el peor imaginable para el PSOE.
Perder por "sólo" 3,7 puntos va a evitarle a corto plazo el mal trago de hacer autocrítica, mientras que la cruda realidad es que si la derrota no parece tan grave en porcentajes absolutos es sólo porque España es el país más bipartidista de Europa. No olvides que en EEUU, por ejemplo, sacar un 40% de los votos a nivel nacional es para republicanos o demócratas una auténtica humillación electoral. No olvides que si el labour ha logrado un 16% y el PSF un 17% en Francia, es en un contexto en que los Tories han ganado con un 28% y la UMP con un 27%.
Y por último no hay que olvidar el catastrófico resultado para la socialdemocracia a nivel europeo. SPD y Labour tocados y hundidos a niveles desconocidos desde hace casi un siglo, el BNP logrando representación por primera vez en el parlamento europeo (con un inquietante 6% de los votos) y la Liga Norte catapultada a un 10% en Italia. Por no decir que una hipotética llegada de Cameron a Downing Street en otoño, propiciada por estos comicios, significaría el probable entierro definitivo del Tratado de Lisboa, y aún más después de que UKIP haya logrado quedar en segundo lugar. De los resultados en Holanda mejor ni hablamos.
Por otra parte, el PSOE no lleva 12 años en el poder como los laboristas o los socialdemócratas alemanes. El PSOE ganó además unas elecciones generales por 4 puntos hace apenas un año. En Alemania o Reino unido ya hace 4 años de las últimas legislativas. Esto constata dos cosas: el rápido desgaste y el peligrosamente volátil suelo electoral de la izquierda.
La cruda realidad es que en tan sólo un año el PSOE ha dilapidado casi todo el capital político que obtuvo en las elecciones de 2008, que el PP le ha dado literalmente la vuelta a esos resultados electorales y que Durán ya está animando al PP a presentar mociones de censura que yo no dudo que se materializarán más pronto que tarde, especialmente si Zapatero es incapaz de sacar adelante los próximos PGE.
Si al menos el PSOE hubiera sufrido un desastre, una hecatombe, si hubiera perdido por diez puntos, se vería obligado a cambiar de rumbo. Zapatero quizá hubiera reconsiderado el perfil excesivamente político e ideologizado de su actual gobierno (muy marcado tras la útima remodelación del ejecutivo). Hubiera sido mejor un terremoto parecido al que sufrió Bill Clinton en el 94, la señal que le despertó a tiempo para ser reelegido dos años más tarde.
Por último, no me quedo a gusto si no digo que con ese diputado de UPyD estamos mandando otro nacionalista (esta vez españolista) a Bruselas. Que en Madrid IU haya pasado a ser la cuarta fuerza es además otro síntoma inequívoco de viraje hacia la derecha que no favorece en nada a la socialdemocracia.
Los partidos de izquierda no pueden cruzar los dedos esperando a que esto sea una tempestad pasajera. Esto no es sólo un voto de castigo. Que los partidos de izquierda bajen incluso en la oposición (con pocas excepciones, como Grecia) indica una quiebra preocupante del modelo socialdemócrata y constata algo muy grave: la ciudadanía no tiene confianza en la izquierda en tiempos de dificultades.
Amen a las palabras de Dion.
Me gusta el análisis, pero hay que destacar lo que hace bitdrain, han votado los fieles, no el resto de la gente que suele ir a votar.
El ascenso del BNP británico tampoco es preocupante, primero por el sistema electoral mayoritario de las legislativas y segundo porque la abstención y el voto de castigo sobredimensiona a los pequeños partidos.
Por lo demás, de acuerdo. A ver que diréis de los análisis de los demás países, cuando salgan :P
Un abrazo a los dos!
Coincido con ciertas realidades que reflejas.
Pero Javi, si habéis perdido 360.000 votos en referencia a 2004.
Si en Europa el batacazo de la socialdemocracia ha sido increíble.
No os podéis creer el mensaje de Ferraz de que los resultados de ayer "son positivos", así seguiremos viendo como la derecha (PP y UPD) avanza.
Tenéis que reflexionar y mucho dentro del PSOE.
Pero veo que os perdéis en porcentajes... y el único porcentaje al que hay que hacer referencia es que la derecha y extrema derecha avanza en Europa y el abstencionismo sube al 56/57%.
Y en cuanto a los otros partidos de izquierda, más de lo mismo. IU se conforma con lo que tiene. Y lo minoritarios, recogiendo los votos de los cabreados.
Por cierto IA ha recibido no solo votos de ex de IU, también ex del PSOE.
La solución, la unión de la izquierda social y política. Más práctica y menos teoría. Y por supuesto, abandonar postulados liberales aquí y en Europa.
Y claro que se puede!!!
Saludos.
Me parece que esto es una derrota de la tercera vía elaborada por el actual premier británico, Gordon Brown. Una tercera vía que ahondaba en los principios neoliberales, matizándolos en algunos aspectos como más gasto público etc...; pero lo más importante es que se trataba de una estafa ideológica.
La socialdemocracia no pierde, el grupo socialista europeo hace tiempo que dejo los principios socialdemócratas vendidos y se abrazó a la Tercera Vía, y es que todos pensaban que era la panacea del socialismo... Y así ha pasado, la izquierda desestructura, sin ideas, la derecha en pleno ascenso y la ultraderecha asaltando el parlamento.
El panorama que se presenta... muy turbio.
buen análisis de Público.
La socialdemocracia se hunde en la peor derrota de su historia
http://www.publico.es/espana/231094/socialdemocracia/hunde/peor/derrota/historia
SAludos
perdón, 360.000 no ... me confundí... 700.000 votos menos que en 2005
Publicar un comentario