Leo en El País la posibilidad de la regeneración interna y el fortalecimiento de cara al exterior del Partido Revolucionario Institucional de México y, de ello, la probabilidad de que el PRI pueda volver a ganar las elecciones legislativas y las presidenciales.
El PRI tiene, a su favor, el desgaste del Gobierno del Partido Acción Nacional, PAN, y del descrédito del Partido de la Revolución Democrática, PRD, por el espectáculo de López Obrador tras las presidenciales. Parece que los 70 años de gobiernos ininterrumpidos, pero autoritarios y no democráticos, del PRI ahora son la garantía de que ellos saben gobernar mejor. Sus competidores a izquierda y derecha han dejado de ser los partidos limpios que eran, porque sin tocar poder las posibilidades de meter mano son mínimas, y ahora todos están igualados en sus manchas.
¿Sería bueno para México? El PRI se ha renovado, tiene nuevas caras. Gobierna en muchos estados mexicanos y municipios. ¿Tiene nuevas ideas? Es un miembro de la Internacional Socialista, pero su práctica autoritaria le ha alejado de la categoría de partido democrático y sus Gobiernos neoliberales le arrebataron parte del apoyo popular. Tiene que seguir siendo, o ser, un partido democrático, dejar el centro neoliberal en el que cayó por el ejercicio del poder sin oposición y entrar en la competición política democrática. La desgracia es que el PRD puede perder su oportunidad de ser la nueva izquierda mexicana, por sus errores tras las presidenciales.
El PRI tiene, a su favor, el desgaste del Gobierno del Partido Acción Nacional, PAN, y del descrédito del Partido de la Revolución Democrática, PRD, por el espectáculo de López Obrador tras las presidenciales. Parece que los 70 años de gobiernos ininterrumpidos, pero autoritarios y no democráticos, del PRI ahora son la garantía de que ellos saben gobernar mejor. Sus competidores a izquierda y derecha han dejado de ser los partidos limpios que eran, porque sin tocar poder las posibilidades de meter mano son mínimas, y ahora todos están igualados en sus manchas.
¿Sería bueno para México? El PRI se ha renovado, tiene nuevas caras. Gobierna en muchos estados mexicanos y municipios. ¿Tiene nuevas ideas? Es un miembro de la Internacional Socialista, pero su práctica autoritaria le ha alejado de la categoría de partido democrático y sus Gobiernos neoliberales le arrebataron parte del apoyo popular. Tiene que seguir siendo, o ser, un partido democrático, dejar el centro neoliberal en el que cayó por el ejercicio del poder sin oposición y entrar en la competición política democrática. La desgracia es que el PRD puede perder su oportunidad de ser la nueva izquierda mexicana, por sus errores tras las presidenciales.
1 comentario:
mejor que gane el partido socialdemocrata de mexico, basta ya de quitar del nombre terminos como socialista, socialdemocrata, solidaridad, etc.
www.psd.org.mx
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