El Tribunal Constitucional Italiano ha declarado inconstitucional la ley que otorga inmunidad contra la justicia a los cuatro altos cargos de la República y suspende los juicios pendientes. Esta ley (laudo Alfano) fue concebida por el centroderecha berlusconiano para salvar de los cuatro juicios pendientes al Ducetto, un verdadero asalto a la independencia judicial y tan criticada que se denominada lodo Alfano (no hacen falta traducciones). Así, la ley será no sólo igual para todos, sino también su aplicación, doctrina diametralmente opuesta a la de los abogados del dueño de Villa Certosa.
Tanto empeño tenía la derecha en mantener la constitucionalidad de la ley, que se inventaron el concepto de primus super pares (primero sobre los iguales), concepto de su abogado y parlamentario Gaetano Pecorella, ya que es el “único de ellos que recibe su legitimidad de la voluntad popular”. Pecorella pasa por alto que los parlamentarios italianos son elegidos por la voluntad popular. Todo esto no es más que una de las muchas formas que siguen para desprestigiar el sistema parlamentario y concebir un nuevo sistema presidencialista y autoritario, a la manera que defendía el corrupto Craxi.
En Italia, la democracia ha demostrado que se resiste a morir ante il Cavaliere. Berlusconi tendrá que someterse a los cuatro juicios que tiene pendientes y acatar la sentencia. Por su edad, si le condenan, no irá a la cárcel pero, ¿a qué grado llegará el circo político italiano si se mantiene en la presidencia del Gobierno? El bloque de centroderecha se sigue rompiendo: la Liga Norte ha vuelto a sus soflamas contra la justicia y los moderados ya piensan en nuevas elecciones, mayorías alternativas y grandes centros. De la izquierda italiana, aún no hay noticias.
2 comentarios:
Algún día la izquierda despertará. Y esperamos que ese día este cerca...
Buenas, te pego un enlace para que te desilustres...
http://tamaimos.com/2009/10/08/dos-memorias-historicas/
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