El modelo más cercano de dictadura del proletario es la Comuna de París de 1871, como nueva forma de Estado, donde hay una autodeterminación de los productores, un gobierno de clase obrera frente al Estado centralizado francés. Engels, tras la muerte de Marx, afirma que la socialdemocracia alemana ha cogido miedo a la dictadura del proletariado y presenta en la Comuna el mejor ejemplo de dictadura del proletariado. Marx ve que la Comuna pasa de democracia representativa a democracia directa, con sufragio universal y con delegados responsables y revocables.
Marx asimila la Comuna como administración, asume la función legislativa, pero no es un cuerpo político, como opresión, sino cuerpo de trabajo. En lugar de ejército y policía surge la milicia popular, el pueblo controla el orden. La burocracia burguesa es sustituida por agentes responsables y elegidos.
Otro grado es la gran descentralización. Marx ve como se puede poner fin a la alienación política y poder emancipar económicamente a los trabajadores. Held identifica el modelo marxista con el modelo de Rousseau, con su papel de legislador fundador, que para Held es el partido obrero.
Para Vallespín el peligro de estos modelos es el dominio de un partido o persona que se arrogue la voluntad general. Marx y Engels nunca dan como ejemplo el modelo que hicieron Lenin y Stalin.
Marx y Engels creen que tras la revolución se abre un proceso de socializar los medios de producción, una transición a la sociedad comunista. La transición es en dos fases: una, en la que seguirán las desigualdades, donde cada cual da según su trabajo, que con el tiempo desaparecen por la socialización y el fin de la división del trabajo y del trabajo manual del intelectual; hasta que se pudiera pasar a la otra fase, donde se de a cada cual según sus necesidades.
No se preocupan de quién debe gobernar y cómo. Viendo las críticas al hegelianismo, a las clases y a la burguesía, ven el futuro donde la esfera personal coincide con la colectiva, exista el nuevo hombre y donde domine la libertad positiva. Cada individuo trabajará para trabajarse a sí mismo como persona, la libre realización de cada uno, la ayuda mutua, el hedonismo muere por el altruismo. Sólo queda la sociedad civil, desaparece el falso ciudadano y la realidad jurídica. Su fin de la historia es así alternativo al liberalismo: sin clases y sin Estado, sin dominación.
Marx asimila la Comuna como administración, asume la función legislativa, pero no es un cuerpo político, como opresión, sino cuerpo de trabajo. En lugar de ejército y policía surge la milicia popular, el pueblo controla el orden. La burocracia burguesa es sustituida por agentes responsables y elegidos.
Otro grado es la gran descentralización. Marx ve como se puede poner fin a la alienación política y poder emancipar económicamente a los trabajadores. Held identifica el modelo marxista con el modelo de Rousseau, con su papel de legislador fundador, que para Held es el partido obrero.
Para Vallespín el peligro de estos modelos es el dominio de un partido o persona que se arrogue la voluntad general. Marx y Engels nunca dan como ejemplo el modelo que hicieron Lenin y Stalin.
Marx y Engels creen que tras la revolución se abre un proceso de socializar los medios de producción, una transición a la sociedad comunista. La transición es en dos fases: una, en la que seguirán las desigualdades, donde cada cual da según su trabajo, que con el tiempo desaparecen por la socialización y el fin de la división del trabajo y del trabajo manual del intelectual; hasta que se pudiera pasar a la otra fase, donde se de a cada cual según sus necesidades.
No se preocupan de quién debe gobernar y cómo. Viendo las críticas al hegelianismo, a las clases y a la burguesía, ven el futuro donde la esfera personal coincide con la colectiva, exista el nuevo hombre y donde domine la libertad positiva. Cada individuo trabajará para trabajarse a sí mismo como persona, la libre realización de cada uno, la ayuda mutua, el hedonismo muere por el altruismo. Sólo queda la sociedad civil, desaparece el falso ciudadano y la realidad jurídica. Su fin de la historia es así alternativo al liberalismo: sin clases y sin Estado, sin dominación.
1 comentario:
Las teorías, las ideas y la política poco solucionan la vida de los ciudadanos :)
Que más da quien gobierne si al final es la corte de amiguetes y "pelotas" los que salen beneficiados.
Mejor dedicarse a la Historia :D
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